El otro día me encontré con mi lapicera.
Fue un encuentro casual y fortuito, como tantos que uno tiene en la vida.
La lapicera me dijo:
– Hooooooola!!! Te acuerdas de mi??
– Claro, le dije, cómo olvidarte!!! solíamos hacer muchas cosas juntos.
– Si… bueno, te he echado de menos…
– Puchas… cierto!!! Es que no sé que decirte… Con esto del computador… tú sabes… ahora hasta en el celular…
– Si, bueno, no creas que es un crítica, es sólo que ya no hacemos lo que hacíamos.
– Muy cierto… quién sabe en el futuro?? Has pensado hacer algo diferente?
– NO!!! Y tú??
– Siiiiiiiiiiiii